Lo he intentado, lo sigo intentando pero no pienso seguir haciéndolo. Estoy cansada, la paciencia tiene un límite. Ya no quiero vivir con ella, necesito un cuarto propio.
Habíamos quedado en tener cada quien sus cosas para evitar problemas, el problema ahora es que yo supuse que el trato comenzaría cuando las dos hubiéramos terminado de usar las cosas ya compartidas, pero parece que ella tomo una decisión diferente, claro después de acabarse mi gel, de seguir usando mi pasta (hasta la fecha) y demás. El punto es que detesto tener que hablar cosas tan obvias. Por qué no puede simplemente respetar mi espacio, mis cosas, mi tiempo.
Estoy realmente cansada, creo que éste es el último semestre.
mayo 18, 2004
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